Ocurrió en un pueblo. A 38 kilómetros de Junín. En Fortín Tiburcio. Allí, vecinos aseguraron haber visto un Objeto Volador No Identificado (Ovni). Los testimonios, similares, se reiteran desde hace años. Pero pocos días atrás, varias personas vieron luces que encandilaban y objetos que no pudieron identificar.
Ariel Chierichetti (51), ex delegado municipal del pueblo, es una de las personas consultadas por este diario que fue testigo y se refirió a lo que él mismo vivió en la madrugada del 20 de julio último, en el camino que hace regularmente desde Tiburcio a su casa, a unos 5 kilómetros del pueblo.
“Me acompañó”
“Estuvo sobre Tiburcio un objeto luminoso, entre la noche del viernes 19 y las primeras horas del 20. En el club había gente festejando el Día del Amigo que también lo vieron. En mi caso, a ese objeto lo vi pero en el camino, ‘me acompañó’ un trayecto hasta el campo, donde yo vivo. Me pareció que no era algo terrestre, por las habilidades que tenía. Era un aparatito muy chiquito, realmente… Me da vergüenza a veces contarlo”, se interrumpió Ariel.
“Al otro día –sigue contando Chierichetti-, cuando le cuento a mi hijo lo que me había pasado a la noche y lo que sentía al decirlo, él me contestó: ‘Pero en Tiburcio ¡lo vimos un montón!, yo también lo vi’”. “Y después uno se encuentra conversando en reunión de amigos, donde hay siete u ocho personas, que comentan y te preguntan qué pasó, cuando salta alguno y dice que él también lo vio pero que tuvo temor de decirlo porque generalmente ‘se te burlan’”, apuntó.
“Creemos que esa noche, en Tiburcio, lo vieron más de cien personas, pero lo que nos pasó a todos es no dejar el pudor, porque podríamos haber llamado a algún medio para que lo filmara, porque estuvo entre las 23 y la 1 de la madrugada en el pueblo y lo vieron no solo gente del lugar sino también de afuera que estaba en Tiburcio esa noche. Hubo quienes lo quisieron filmar con el celular pero aparentemente se les terminó la batería, o se les consumió de repente”, manifestó.
Descripción
De acuerdo a lo manifestado por el testigo, el “aparato” era un Ovni. “No tenía la forma redonda, sino con alas, una cúpula central y una cola corta. Era un aparato muy chico. Parecía un avión chiquito, pero con una cúpula grande, con luces en el extremo de las alas que se iban diluyendo a medida que iban hasta el centro del aparato. El color era plomizo fuerte y tenía una habilidad de vuelo espectacular, porque yo, cuando me doy cuenta que era un aparato no conocido, puse la camioneta a 150 kilómetros en camino de tierra, que gracias a Dios está bueno, y el aparato zigzagueaba delante mío con una habilidad increíble. Hacía giros, pasaba sobre una línea de alta tensión, tomaba altura, luego bajaba, como si uno manipulara una luz, con una habilidad asombrosa, por eso me parece que es un objeto no terrestre porque no hay algo que acá tenga esa velocidad y tenga esas habilidades”, describió.
“Cuando llegué a mi casa, no guardé la camioneta en el galpón que está a 50 metros de la casa, sino en la galería, que está ahí nomás. Me bajé, entré y no dije nada… Al rato, cuando le conté a mi señora, ella me dijo ¡vamos a buscarlo!, y le contesté: ‘No, dejalo, no te metas con lo que no conocés. Me asusté mucho… Creo que el aparato estuvo sobrevolando arriba del monte del campo nuestro”, afirmó.
Otros testimonios
Además de gente de Tiburcio, el supuesto Ovni fue visto por otras personas que casualmente estaban en el pueblo aquella noche del viernes 19 de julio y madrugada del 20. Uno de ellos es Mauro Gallese (31), oriundo de Ascensión, quien junto a Javier Sánchez y otros amigos estuvieron allí y lo vieron.
En diálogo con Democracia Gallese manifestó que pudo filmarlo un ratito, aquella madrugada del 20 de julio último, mientras estaba a una cuadra del Club de Tiburcio. “Salíamos de comer, y vimos esa luz blanca, cerca de la calle, a 50 metros de donde estábamos nosotros. Lo filmé, pero cuando vi el video se veía todo negro, era como que no había nada, y eso que lo filmé como 20 minutos. Veíamos que la luz se movía, corría, cuando nos acercábamos”, dijo.
El encargado de patrullar la zona rural de Tiburcio, el policía Horacio Artero, afirmó a Democracia que vivió un episodio singular en abril de 2012. “Fueron segundos –dijo el oficial- que vi la luz. En realidad, cuando la ví de lejos, creí que era una moto, en el camino cerca del criadero de cerdos. Entonces doy una vuelta de manzana al campo y como me pareció sospechoso, reduje la velocidad y apagué las luces del patrullero... De pronto vi la luz, encima del vehículo, una luz blanca, muy fuerte, parecida a las que se producen al soldar, que me iluminaba solo a mí, desde arriba. Fueron 4 ó 5 segundos y después se apagó de golpe. Abrí la ventanilla, no había nada arriba, no estaba nublado ni había viento, era una noche estrellada”.
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